Presentación de defensa de tesis: Elementos teóricos y conceptuales  en torno a la estigmatización social de las corporalidades gordas. Un análisis desde las dimensiones de la salud y la aparienciaPresentación de defensa de tesis:

Esta es la presentación de diapositivas que usé para defender mi tesis de magíster acerca de los procesos que explican la gordofobia, o el fenómeno de discriminación de las personas gordas.

Relato autobiográfico de mi cuerpo

Mis primeros recuerdos sobre mi cuerpo son accidentes, heridas, cicatrices. Mi mamá, ya separada, buscando cómo llevarme a la posta. También discusiones, peleas, cambios de casa propios de un divorcio cuando tenía apenas un par de años. Eso igual marca el cuerpo. Después, vergüenzas que me siguen hasta ahora, como el disfraz de pececito verde que no quise ponerme, pero que ahora encuentro bellísimo: formas de expresarme que fueron reprimidas, y luego quizás resurjeron.

Más tarde, secretos que guardo hasta hoy, que siento que en parte fueron premonitorios: situaciones que ahora reconozco que eran sobre roles de género, sexualidad y sobre mi propia identidad, pero que en ese entonces parecían confusiones que –por alguna razón– sabía que estaban mal. Mis primeras experiencias sexuales fueron todas homoeróticas, rápidamente sancionadas o reprimidas. Fueron varios los momentos donde la identidad estuvo en duda. Recuerdo vívidamente estar en el patio jugando, montado en un autito de plástico, y preguntarle a mi abuelita si es que yo podía ser una niña. Claramente me respondió que imposible, y lo más probable es que haya rezado semanas por mi masculinidad. También recuerdo a mi mamá hacer excusas sobre mis gustos, particularmente a ella diciendo “es que es… sensible” a una cajera del supermercado.

Fue una infancia linda, rodeada de mujeres. Mi abuela me crió, fue como mi madre; mi mamá trabajaba demasiado para sostenernos, siempre ha sido como un sol de atardecer. Luego mi querida tía-abuela, de forma remunerada. Mi abuelo, por su parte, era un proveedor. Entre harina de pescado, planos y sindicatos de papeleras, proveyó de recursos a mi abuela y sus 5 hijos/as, pero nunca supo ni hacer tallarines. Aún sufre de un acto reflejo que consiste en reprimir las lágrimas propias y las de los demás. Mi abuelo, ese que me hacía mirar las modelos de un comercial en una revista, y me hacía elegir mi favorita, yo sin entender mucho.

¿Cómo se forja el cuerpo? Probablemente mediante la experiencia, la presión, la comparación, la vergüenza. Todo eso lo viví en el colegio, la adolescencia. Siempre tuve mejores amigas, siempre me molestaron por ser diferente. Rápidamente se me hizo saber que era hombre, o más bien, que debería serlo. Estar en el vórtice de la masculinidad, centro del mundo, conlleva un bagaje implícito enorme. Este cuerpo tiene algo que le hizo ser conferido poder. Un poder que, aunque se elija no ejercer, de todos modos es reconocido como tal por los demás. El sistema sexo-género produjo género a partir de esta carne.

No fue una adolescencia traumática ni mucho menos. El trauma vino después. Cual postulado psicoanalítico, las consecuencias de negarse al falo fueron una especie de castración… “Maricón”, porque el hombre que no es macho es un otro, otra posición por dominar. “Hombre con vagina”, porque la masculinidad es entendida como biológica, fluye en la sangre propia, el semen, y la sangre derramada; tiene órganos y formas que le inyectan virilidad, y negarse a ella claramente indica una falencia fisiológica. “Eunuco”, por lo mismo, porque un hombre que no es macho vale lo mismo que un hombre sin genitales, es un hombre que se castró a sí mismo y que, en consecuencia, es re-castrado sin cesar por sus ex-pares. “Sólo quiere ponerla”, como si la única razón para problematizar la propia posición en la estructura de género sea obtener algo a cambio. “Escombro”, porque significa ser lo más bajo, una sobra, basura, una ruina de la masculinidad: algo que ya fue destruido, y que debe ser desechado. “Traidor de género”, –mi favorito– porque reconocen que existe un pacto patriarcal implícito entre hombres que les beneficia, una “conciencia de género” donde los hombres reproducen su dominación y son cómplices de sus actos con la finalidad de defender sus intereses. Saben que un traidor pone en riesgo ese pacto. Todas esas fueron heridas que terminaron cicatrizando distinto.

Paralelamente, un proceso diferente. Caótico. La experiencia de sentir alienación respecto de mi propio cuerpo: disforia. No pertenecer a ninguna parte. Un cuerpo que no es mío y que me ataca desde el espejo. Fue como cuando éramos chicos y una ola te botaba en la playa, y sentías el agua pasar sobre ti mientras girabas por segundos eternos. Heridas abiertas y cicatrizando. Millones de marcas sexuales secundarias en mi piel, que resurgen, como los pelos de un insecto. Estructura ósea, genitales, texturas, culpas, deseos e ideas incorrectas y por corregir. Odio a lo que soy, que lleva a desear cambiarlo todo, por sentir que este cuerpo no soy yo. Sentirme como la misma burla que me dijeron que era. Un fraude. Pero también, pequeños momentos de júbilo: el reconstruirme, el descubrirme, genera una felicidad que a veces raya en lo absurdo. Si llego a dudar de lo que soy, o si realmente me siento un fraude, recuerdo que esos momentos de euforia no pueden sino ser reales. Por eso es que, entre dudas y reafirmaciones, esta es una biografía inconclusa, porque aún sigue en transición.


Relato escrito para la clase de la profesora Kemy Oyarzún, bajo la temática de la autografía del propio cuerpo, en el marco del diplomado en Estética, Feminismo y Crítica de la Universidad Católica. Junio, 2021.

Apuntes: Rosi Braidotti – La ética de la diferencia sexual: el caso de Foucault e Irigaray

(en Sujetos nómades. Corporización y diferencia sexual en la teoría feminista contemporánea, 2000, Paidós)

La idea de femenino creado por la cultura falogocéntrica, y que lo asocia a lo decadente, corrupto, trastornado, no tiene relación con las mujeres de la vida real. (149)

Es distinta la imagen creada de lo femenino versus la experiencia de las mujeres.

“Tensión entre las imágenes y representaciones de la “mujer” construidas por el hombre y las experiencias de las mujeres de la vida real”:

La cuestión real es la colisión frontal entre los supuestos patriarcales acerca de lo femenino y la realidad existencial de las vidas y el pensamiento de las mujeres, que el feminismo nos ha ayudado a expresar. 150

La crisis del pensamiento moderno, que es la crisis de la idea del sujeto racional, ha dado lugar a que el tema de la ética y la condición del otro ganen importancia en al filosofía, y es el movimiento de mujeres la fuente primaria de la dislocación del sujeto racional.

La absoluta importancia que adquirió la cuestión de la ética en la obra de algunos filósofos varones es una consecuencia de la crisis del sujeto racional que ha sacudido hasta los cimientos mismos del sistema falogocéntrico. La cuestión de la alteridad, de la condición de “otro”, está suscitando renovada atención preci- samente a causa de la problematización que sufren las estructuras de la subjetividad en el pensamiento moderno. Creo firmemente que el movimiento de las mujeres es una de las fuentes primarias de la dislocalización del sujeto racional. 150

Continua leyendo “Apuntes: Rosi Braidotti – La ética de la diferencia sexual: el caso de Foucault e Irigaray”

Apuntes: Rosi Braidotti – Devenires discontinuos: Deleuze y el “devenir mujer” de la filosofía

(en Sujetos nómades. Corporización y diferencia sexual en la teoría feminista contemporánea, 2000, Paidós)

Devenir

El devenir deleuzeano es la afirmación del carácter positivo de la diferencia, entendida como un procesó múltiple y constante de transformación. En él se renuncia al orden teleológico y a las identidades fijas en favor de un fluir de devenires múltiples. (131-132)

Cuerpo en Deleuze

Deleuze entiende más bien el cuerpo como el interjuego complejo de fuerzas sociales y simbólicas en alto grado construidas. El cuerpo no es una esencia y mucho menos una sustanciabiológica; es un juego de fuerzas, una superficie de intensidades; simulacros puros sin originales. 132-133

Sujeto corporizado como intersecciones de afectos; posiciones de sujeto como multiplicidad de subjetividades de distinto grafo y conectadas entre sí:

El sujeto corporizado es un término en un proceso de fuerzas (afectos) que se intersectan, variables temporoespaciales que se caracterizan por su movilidad, su carácter modificable y su naturaleza transitoria. En este sentido, la obra de Deleuze no se fundamenta en una oposición dicotómica de las posiciones de sujeto masculino y femenino, sino que lo hace en una multiplicidad de subjetividades sexuadas. Las diferencias de grado entre ellas marcan diferentes líneas de devenir, en una red de conexiones rizomáticas. 133

Continua leyendo “Apuntes: Rosi Braidotti – Devenires discontinuos: Deleuze y el “devenir mujer” de la filosofía”

Apuntes: Rosi Braidotti – Hacia una nueva representación del sujeto

(en Sujetos nómades. Corporización y diferencia sexual en la teoría feminista contemporánea, 2000, Paidós)

Modernidad:

entiendo la modernidad como el momento de decadencia del racionalismo clásico y de la visión del sujeto unida a él. Los nuevos discursos científicos relacionados con condiciones históricas cambiantes se oponen a la identificación ya centenaria del sujeto con su yo racional. La idea misma de lo que significa ser humano está en tela de juicio (112)

Feminismo como filosofía

Universalismo y dualismo

Desde la crítica al sujeto universal del conocimiento:

El feminismo como filosofía crítica se apoya en el supuesto de que aquello que solía llamarse “el sujeto universal de conocimiento” es un punto de vista falsamente generalizado (113)

Crítica al sujeto tácitamente reconocido como varón/blanco/heterosexual/clase media de los discursos dominantes (ciencia, religión, derecho, producción del conocimiento) (113): “lo que se entendía por “universal” se presenta como un enfoque muy particular y específico” 113

Lo anterior era la base del poder de exclusión del universalismo sobre categorías consideradas minoritarias u otras.

Continua leyendo “Apuntes: Rosi Braidotti – Hacia una nueva representación del sujeto”

Apuntes: Genara Pulido – Violencia epistémica y descolonización del conocimiento

Violencia epistémica

Desde el “deseo de imponer maneras de entender y formular el conocimiento al Otro” (175)

La violencia epistémica empieza con la colonización y se reformula con el neocolonialismo e imperialismo (175).

Violencia estructural: base de las desigualdades existentes entre primer y tercer mundo

Violencia simbólica: violencia cultural, sutil, cuya función es legitimar la violencia estructural y directa, manifestándose en discursos, símbolos, metáforas, etc.

Violencia epistémica: refiere a la producción y al modo en que el poder se apropia y condiciona dicho conocimiento. (175-176)

Conocimiento como estrategia de dominio colonial

La violencia epistémica se destaca porque es consciente de los “efectos que causa el saber sobre sus sujetos y objetos (…) la importancia que ha tenido el conocimiento producido por los colonizadores e impuesto a los colonizados para el triunfo del dominio colonial.” (176)

Se manifestó por los colonizadores europeos en discursos que posibilitaron y racionalizaron la dominación colonial, produciendo “Otras Sociedades y Otras Culturas” (176)

Crear a la representación del Otro:

que la historia no es una producción imparcial de conocimientos, sino un proceso de violencia epistémica, construcción interesada en presentar una determinada representación de un objeto que puede no tener existencia empírica al margen de esa representación. 176

Continua leyendo “Apuntes: Genara Pulido – Violencia epistémica y descolonización del conocimiento”

Apuntes: Rosi Braidotti – Órganos sin cuerpos

(en Sujetos nómades. Corporización y diferencia sexual en la teoría feminista contemporánea, 2000, Paidós)

Foucault: economía política de la verdad sobre la sexualidad en la cultura.

La tecnología anticonceptiva (distinción entre tecnología del poder reproductor y prácticas de placer del sí mismo) separa la reproducción y sexualidad, evitando que se vuelvan contradicción o paradoja activa (86).

Sexo sin bebés, bebés sin sexo.

Manipulación conservadora de la epidemia del sida: “el sexo mata” (87).

Auge de las biotecnologías y tecnologías que tienen por objeto la vida y los organismos vivos en los ‘90.

Jameson: “uno de los rasgos que definen la condición posmoderna es la dislocación de la continuidad temporoespacial” 88

Deleuze: estado posmoderno definido en términos de secuencias temporales esquizofrénicas. 89

Desde el postestructuralismo (Bachelard, Canguilhem hasta Foucault), el cuerpo fabrica tecnología en pos de una extensión orgánica de sí mismo: herramientas, armas, artefactos, lenguaje, prótesis. La tecnología de por sí no es perjudicial, sino que lo tecnológico se penetra por un antropomorfismo primitivo; ergo, “todas las herramientas son productos de la imaginación creativa humana, que copian y multiplican las potencias del cuerpo”. 89

Continua leyendo “Apuntes: Rosi Braidotti – Órganos sin cuerpos”

Apuntes: Giorgio Agamben – Gusto

Fuente: Agamben, G. 2015. Gusto. Buenos Aires: Adriana Hidalgo Editora.

La palabra griega para sabio (sophós) proviene etimológicamente a la familia de gustar (sapio), degustador y perceptible al gusto.

Entre los siglos XVII y XVIII empieza a surgir el gusto, la facultad específica “a la que se le confían el juicio y el goce de la belleza”, bajo el término gusto, “opuesto metafóricamente como un sentido figurado a la acepción propia” (8)

Kant: El enigma del gusto ya sé en la interferencia entre saber y placer:

Si bien estos juicios no contribuyen en nada al conocimiento de las cosas, pertenecen sin embargo únicamente a la facultad de conocer y revelan una relación inmediata de esta facultad con el sentimiento del placer. Esta relación es precisamente lo que hay de enigmático en la facultad del juicio. 9

Gusto como otro saber: “un saber que no puede dar razón en su conocer, pero goza de él” (9)

Montesquieu: “la aplicación pronta y exquisita de reglas que ni siquiera se conocen” (9)

Continua leyendo “Apuntes: Giorgio Agamben – Gusto”

Extractos: Karen Cordero – La escritura de la historia del arte: sumando(se) subjetividades, nuevas objetivaciones

tal vez decir sencillamente «escritura del arte» tendría más sentido

La base de la historia del arte es traducir el arte en un relato y modos de ordenamiento conceptual:

Traducir el arte en un relato es la base de la disciplina de la historia del arte, es convertir la experiencia sensorial o corporal, y su incorporación consciente, en categorías lingüísticas, en modos de ordenamiento conceptual a los que a menudo se les ha otorgado la categoría de «objetivos», pues se sustentan en metodologías que entretejen la forma y la materia de artefactos (y su recepción) con procesos culturales y políticos.

La escritura sobre el arte ha definino lo que es arte mediante categorías legitimadas y otras marginadas, argumentos de valor, relaciones conceptuales:

la escritura que lo inscribe en la historia (o sea, que ocupa los discursos que ubican el arte como parte de la «Historia»), en gran medida, de hecho, ha definido qué se considera «Arte» al legitimar ciertas categorías de objetos y marginar otros; ha argumentado su valor relativo y absoluto; ha creado términos (estilos, corrientes, movimientos) que facilitan establecer relaciones conceptuales entre obras, pero que a la vez corren el peligro de reemplazar el acto de mirada y la vivencia, o de relegar su potencialidad.

Continua leyendo “Extractos: Karen Cordero – La escritura de la historia del arte: sumando(se) subjetividades, nuevas objetivaciones”

Extractos: Griselda Pollock – Visión, voz y poder: historias feministas del arte y marxismo

Historia del arte

La historia social del arte —formada por un análisis marxista de la sociedad— constituye un corpus radicalmente nuevo de trabajo para la historia del arte que apunta hacia un desafío de la hegemonía de la historia burguesa y moderna del arte. 46

la historia social del arte yace dentro del ámbito de la teoría cultural y la práctica histórica del marxismo. Debido a que, en gran medida, la sociedad se encuentra estructurada con base en relaciones de inequidad en el aspecto de la producción material, también se halla estructurada sobre divisiones y desigualdades sexuales. La naturaleza de las sociedades en las que se produce el arte, no ha sido solamente, por ejemplo, feudal o capitalista, sino patriarcal y sexista. Ninguna de estas formas de explotación es reducible a la otra. 46

Cultura y desafío a las definiciones sociales de la realidad:

La cultura puede ser definida como aquellas prácticas sociales cuya primera dirección es la significación; por ejemplo, la producción de sentido, o establecer órdenes de “sentido” para el mundo en que vivimos. La cultura es el nivel social en el que se producen aquellas imágenes del mundo y definiciones de la realidad que pueden ser ideológicamente movilizadas para legitimar un orden de relaciones de dominación y subordinación existente entre clases, razas y sexos. La historia del arte se ocupa de un aspecto de esta producción cultural —el arte— como su objeto de estudio; pero la disciplina misma es también un componente crucial de la hegemonía cultural ejercida por la clase, raza y género dominantes. Es por eso que resulta importante desafiar las definiciones de la realidad de nuestra sociedad, que son producidas en las interpretaciones de la cultura desde la historia del arte. 47

Arte como práctica social:

Es una de las prácticas sociales por medio de las cuales se construyen, reproducen e incluso redefinen las visiones particulares del mundo, definiciones e identidades. 59

Continua leyendo “Extractos: Griselda Pollock – Visión, voz y poder: historias feministas del arte y marxismo”