Mapa conceptual: bibliografía sobre estigmatización de la gordura en las dimensiones de la apariencia y la salud

Éste es el mapa conceptual que usé para ir organizando la bibliografía recopilada para el desarrollo de mi tesis de magíster, titulada Elementos teóricos y conceptuales en torno a la estigmatización social de las corporalidades gordas. Un análisis desde las dimensiones de la salud y la apariencia”.

Cada nodo representa un texto, agrupado por temática general (color) y sub-temáticas (los sub nodos y ramas del árbol).

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Entrevista: La meritocracia de la delgadez, la insubordinación de la gordura

Comparto el texto de una entrevista que me realizó este año Raúl Nagore, periodista y parte del Basque Culinary Center de San Sebastián y la asociación de cocineros Euro-Toques, que será publicada en un número futuro del periódico Papeles de Cocina. La entrevista viene con una introducción y se da en formato de pregunta/respuesta. ¡Muchas gracias Raúl por la conversación y la oportunidad!


La meritocracia de la delgadez, la insubordinación de la gordura

¿Un cuerpo gordo es necesariamente un cuerpo insano? ¿Cuando sugerimos a alguien que debería adelgazar le estamos ayudando o contribuyendo a su baja autoestima? ¿Es más importante el efecto en su salud física o en su salud mental? ¿Por qué en mayor o menor medida todos somos gordófobos? ¿Juzgamos a los gordos por su falta de salud o por su falta de disciplina? El sociólogx chileno Bastián Olea Herrera, especializado en sociología del cuerpo y del género, ha dedicado buena parte de su trabajo a estudiar estos temas y comparte en la siguiente entrevista una visión nada convencional de la gordura, tratando de identificar herencias culturales, prejuicios, medias verdades y asunciones que terminan por culpabilizar y estigmatizar a las personas gordas y dificultar sus vidas.

Has escrito que “el ideal de belleza moderno determina la modificación y normalización de los cuerpos gordos, cuya existencia imperfecta y excesiva significa una transgresión al ideal de belleza y un desafío a sus preceptos”. ¿Son las personas gordas ciudadanos incorrectos?

La sociedad suele interpretar a las personas gordas como ciudadanos incorrectos por un fenómeno común en nuestra vida en sociedad, que es el hecho de que casi inconscientemente cuando vemos a una persona asumimos cosas sobre ella, tenemos prejuicios basados en lo que estamos viendo, sacamos conclusiones acerca de quién es, aunque no la conozcamos. Por este mismo fenómeno, sumado al hecho de que en nuestra sociedad tenemos ciertos valores, al ver a una persona gorda interpretamos que algo está haciendo mal, que algún error está cometiendo o que alguna decisión incorrecta está tomando. Esto nos invita inmediatamente a una especie de juicio, de sospecha hacia estas personas, y también a una cierta inferiorización de ellas. 

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Presentación de defensa de tesis: Elementos teóricos y conceptuales  en torno a la estigmatización social de las corporalidades gordas. Un análisis desde las dimensiones de la salud y la aparienciaPresentación de defensa de tesis:

Esta es la presentación de diapositivas que usé para defender mi tesis de magíster acerca de los procesos que explican la gordofobia, o el fenómeno de discriminación de las personas gordas.

Resumen: Nelly Richard – Feminismo, género y diferencia(s): Transgresión y escritura femenina

Resumen del capítulo 1, “¿Tiene sexo la escritura?”, del libro de Nelly Richard, Feminismo, género y diferencia(s). Excelente texto que a crítica distintas concepciones de lo que es considerado “escritura femenina”, tanto desde perspectiva hegemónica/patriarcal como desde un feminismo esencialista, para posteriormente desarrollar una teoría de una feminización de la escritura que no esté anclada en las categorías biológicas de sus autores, sino en la capacidad semiótica de transgresión, flujo y desestructuración de aquellos textos que buscan desafiar las normas sociales mediante lógicas distintas a las del universalismo masculino.

En la parte superior del mapa conceptual hay un conveniente esquema de dos pistas que describe el proceso de naturalización del género mediante su imposición cultural, y posteriormente su reproducción.

El segundo nodo del mapa conceptual presenta tres formas en las que Nelly Richard define al feminismo: feminismo como movimiento de mujeres, feminismo como teoría feminista, y feminismo como crítica feminista.

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Resumen: R. W. Connell – Masculinidades (capítulo 9, políticas de la masculinidad)

Resumen del capítulo 9 del libro Masculinidades, de R. W. Connell, donde se problematizar algunas formas de buscar la superación de la masculinidad hegemónica, sus beneficios y dificultades, así como los desvíos reaccionarios en torno a la relación de las masculinidades críticas y el feminismo.

R. W. Connell. (1995). Masculinities. Polity Press

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Resumen: R. W. Connell – Masculinidades (capítulo 8, historia de la masculinidad)

Resumen del capítulo 8 del libro Masculinidades, de R. W. Connell, que entrega una visión general de ciertos hitos históricos que configuran la masculinidad hegemónica occidental que conocemos.

R. W. Connell. (1995). Masculinities. Polity Press

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Relato autobiográfico de mi cuerpo

Mis primeros recuerdos sobre mi cuerpo son accidentes, heridas, cicatrices. Mi mamá, ya separada, buscando cómo llevarme a la posta. También discusiones, peleas, cambios de casa propios de un divorcio cuando tenía apenas un par de años. Eso igual marca el cuerpo. Después, vergüenzas que me siguen hasta ahora, como el disfraz de pececito verde que no quise ponerme, pero que ahora encuentro bellísimo: formas de expresarme que fueron reprimidas, y luego quizás resurjeron.

Más tarde, secretos que guardo hasta hoy, que siento que en parte fueron premonitorios: situaciones que ahora reconozco que eran sobre roles de género, sexualidad y sobre mi propia identidad, pero que en ese entonces parecían confusiones que –por alguna razón– sabía que estaban mal. Mis primeras experiencias sexuales fueron todas homoeróticas, rápidamente sancionadas o reprimidas. Fueron varios los momentos donde la identidad estuvo en duda. Recuerdo vívidamente estar en el patio jugando, montado en un autito de plástico, y preguntarle a mi abuelita si es que yo podía ser una niña. Claramente me respondió que imposible, y lo más probable es que haya rezado semanas por mi masculinidad. También recuerdo a mi mamá hacer excusas sobre mis gustos, particularmente a ella diciendo “es que es… sensible” a una cajera del supermercado.

Fue una infancia linda, rodeada de mujeres. Mi abuela me crió, fue como mi madre; mi mamá trabajaba demasiado para sostenernos, siempre ha sido como un sol de atardecer. Luego mi querida tía-abuela, de forma remunerada. Mi abuelo, por su parte, era un proveedor. Entre harina de pescado, planos y sindicatos de papeleras, proveyó de recursos a mi abuela y sus 5 hijos/as, pero nunca supo ni hacer tallarines. Aún sufre de un acto reflejo que consiste en reprimir las lágrimas propias y las de los demás. Mi abuelo, ese que me hacía mirar las modelos de un comercial en una revista, y me hacía elegir mi favorita, yo sin entender mucho.

¿Cómo se forja el cuerpo? Probablemente mediante la experiencia, la presión, la comparación, la vergüenza. Todo eso lo viví en el colegio, la adolescencia. Siempre tuve mejores amigas, siempre me molestaron por ser diferente. Rápidamente se me hizo saber que era hombre, o más bien, que debería serlo. Estar en el vórtice de la masculinidad, centro del mundo, conlleva un bagaje implícito enorme. Este cuerpo tiene algo que le hizo ser conferido poder. Un poder que, aunque se elija no ejercer, de todos modos es reconocido como tal por los demás. El sistema sexo-género produjo género a partir de esta carne.

No fue una adolescencia traumática ni mucho menos. El trauma vino después. Cual postulado psicoanalítico, las consecuencias de negarse al falo fueron una especie de castración… “Maricón”, porque el hombre que no es macho es un otro, otra posición por dominar. “Hombre con vagina”, porque la masculinidad es entendida como biológica, fluye en la sangre propia, el semen, y la sangre derramada; tiene órganos y formas que le inyectan virilidad, y negarse a ella claramente indica una falencia fisiológica. “Eunuco”, por lo mismo, porque un hombre que no es macho vale lo mismo que un hombre sin genitales, es un hombre que se castró a sí mismo y que, en consecuencia, es re-castrado sin cesar por sus ex-pares. “Sólo quiere ponerla”, como si la única razón para problematizar la propia posición en la estructura de género sea obtener algo a cambio. “Escombro”, porque significa ser lo más bajo, una sobra, basura, una ruina de la masculinidad: algo que ya fue destruido, y que debe ser desechado. “Traidor de género”, –mi favorito– porque reconocen que existe un pacto patriarcal implícito entre hombres que les beneficia, una “conciencia de género” donde los hombres reproducen su dominación y son cómplices de sus actos con la finalidad de defender sus intereses. Saben que un traidor pone en riesgo ese pacto. Todas esas fueron heridas que terminaron cicatrizando distinto.

Paralelamente, un proceso diferente. Caótico. La experiencia de sentir alienación respecto de mi propio cuerpo: disforia. No pertenecer a ninguna parte. Un cuerpo que no es mío y que me ataca desde el espejo. Fue como cuando éramos chicos y una ola te botaba en la playa, y sentías el agua pasar sobre ti mientras girabas por segundos eternos. Heridas abiertas y cicatrizando. Millones de marcas sexuales secundarias en mi piel, que resurgen, como los pelos de un insecto. Estructura ósea, genitales, texturas, culpas, deseos e ideas incorrectas y por corregir. Odio a lo que soy, que lleva a desear cambiarlo todo, por sentir que este cuerpo no soy yo. Sentirme como la misma burla que me dijeron que era. Un fraude. Pero también, pequeños momentos de júbilo: el reconstruirme, el descubrirme, genera una felicidad que a veces raya en lo absurdo. Si llego a dudar de lo que soy, o si realmente me siento un fraude, recuerdo que esos momentos de euforia no pueden sino ser reales. Por eso es que, entre dudas y reafirmaciones, esta es una biografía inconclusa, porque aún sigue en transición.


Relato escrito para la clase de la profesora Kemy Oyarzún, bajo la temática de la autografía del propio cuerpo, en el marco del diplomado en Estética, Feminismo y Crítica de la Universidad Católica. Junio, 2021.

Ira

Siento una rabia que es conmigo
Con lo que soy, lo que me tocó ser,
lo que fui
Y con la incertidumbre de si un día seré

A riesgo de sonar autoflagelante,
Mi ira la he vuelto interna
Porque sé lo que encarno
Porque hay cosas que me acercan más a ellos
Seres de furia, egos, poder, violencia
Porque creo haber aprendido lo que ellos pretenden y desean
Hay todo un trabajo por hacer

¿Hay emociones de hombre o de mujer?
Absurdo. Pero algo de sentido tiene
Hay expresiones patriarcales de la emoción; o bien, que pueden interpretarse como tales
Con una amiga bromeábamos expresando todas nuestras emociones como ira, en parodia a los hombres, o quizás a nuestro lado masculino

No es que crea que la ira sea mala, o del todo masculina;
me enseñaron que la ira tiene sus lugares
Pero quizás no entiendo
Supe que la ira que siento debo dirigirla hacia un sistema
y sus constructos
¿Pero cómo hacerlo si en el espejo sigo viendo a ese sistema en mi? Veo a mi enemigo
Así que en cada palabra y en cada paso
me vuelvo una duda
Espero que esta ira me libre.
Audre Lorde: La ira es el dolor motivado por las distorsiones que nos afectan a todas, y su objetivo es el cambio.


Poema escrito para la clase de la profesora Kemy Oyarzún, bajo la temática de la ira, en el marco del diplomado en Estética, Feminismo y Crítica de la Universidad Católica. Mayo, 2021.

Resumen: R. W. Connell – Masculinidades (capítulo 2, organización social de la masculinidad)

Resumen del capítulo 2 del libro Masculinidades, de R. W. Connell, que plantea un marco general para entender el concepto de masculinidad, su relación con el género y el cuerpo, y algunos elementos que componen la masculinidad.

R. W. Connell. (1995). Masculinities. Polity Press

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Resumen: R. W. Connell – Masculinidades (capítulo 1, la ciencia de la masculinidad)

Resumen del capítulo 1 del libro Masculinidades, de R. W. Connell, que habla sobre la forma en que se ha estudiado la masculinidad en distintas disciplinas como la psicología, antropología, historia y sociología. Útil para indagar en los orígenes del concepto de masculinidad, y sus primeros referentes.

R. W. Connell. (1995). Masculinities. Polity Press

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